Luego de que un hombre asesinara a tres personas e hiriera a otras cinco en Wurzburgo, al sur de Alemania, tras robar un cuchillo en un comercio, la policía alemana se encuentra investigando los motivos que llevaron al joven a presuntamente cometer el hecho.
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La situación tuvo lugar al final de la tarde en un local comercial de la ciudad antes referida. Según pruebas filmográficas captadas por testigos presenciales, se ve al presunto atacante descalzo, con un cuchillo en la mano, en la calle. Varios transeúntes intentaron detenerle con algunos objetos, pero no fue hasta la intervención policial que se logró capturar al hombre.
El viernes, poco después del ataque, el ministro del Interior, Joachim Herrmann, reveló que el presunto autor, de 24 años, era conocido desde hace meses por actos de violencia y problemas psiquiátricos. Según la DPA, tenía tiempo habitando un centro para personas sin domicilio.
Ante este hecho, el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, se mostró conmocionado tras este “horrible acto de violencia, en el que el agresor mostró una brutalidad extrema”.
El hecho escaló a la palestra política alemana luego de que el partido de extrema derecha, Alternativa para Alemania (AFD), se valiera de este hecho para denunciar “los asesinatos islamistas con cuchillo en pleno corazón de Alemania”, según un tuit de su copresidente, Jörg Meuthen.
La versión de un posible testigo presencial, alega que el agresor habría vociferado la consiga de “Alá Akbar” (Alá es grande) mientras perpetraba el ataque.
Hasta los momentos la fiscalía nacional antiterrorismo no se ha hecho cargo del caso. La policía local indicó que el agresor no era conocido por motivaciones religiosas.
