El gobierno encargado de Bolivia desplegó militares en las calles para evitar cualquier tipo de violencia durante la movilización que anunció para el miércoles 22 de febrero el Movimiento al Socialismo (MAS), según el diario La Razón.
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Los sectores afectos al expresidente Evo Morales indicaron que esta acción por parte del gobierno que preside Jeanine Añez es “una provocación que no contribuye a pacificar el país”.
Por su parte los que apoyan a la mandataria encargada “creen que la presencia de los uniformados es necesaria, ante las amenazas del inicio de movilizaciones el 22 de enero, cuando concluye la gestión constitucional y acaba el mandato de Morales”.
Desde el jueves los militares y policías se han desplazado en el centro de la sede de Gobierno, según Infobae.
