El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, aseguró que después de dos meses de registrarse protestas en su país la situación se calmó y acusó a Rafael Correa de las manifestaciones que enfrentaron los ecuatorianos meses atrás.
En un entrevista el mandatario indicó que la situación en Ecuador está controlada y el diálogo con diversos sectores sociales continúan para llegar a acuerdos en varios temas “entre ellos la posibilidad de focalizar el subsidio de los combustibles para que afecte lo menos posible a los sectores menos pudientes”.
Asimismo, señaló que lo ocurrido en su país fue responsabilidad de sectores criminales que se infiltraron y “fueron pagados” por el correísmo y personas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y “asalariados maduristas”, que se han camuflado dentro de los casi 4000 mil venezolanos que han ingresado en el país como inmigrantes.
Además, aseguró que la fiscalía tiene pruebas a la “conspiración” del correísmo, “se hicieron allanamientos (registros) por orden de la Fiscalía, no por orden del Ejecutivo, intervenciones telefónicas y están encontrando elementos de convicción”.