Las autoridades sanitarias de España estudian el impacto de las nuevas variantes registradas de la covid-19 denominadas épsilon y lambda, a pesar que sus niveles de transmisibilidad sean menores en la nación europea.
La mutación épsilon (B.1427 o B.1429), reportada por primera vez en California, Estados Unidos, disminuye la eficacia de las vacunas aprobadas por la Unión Europea.
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Además, su grado de transmisibilidad es mayor y su prevalencia es escasa en Europa porque no se han reportado tantos casos de la variante, que ha sido catalogada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) de “interés”.
Mientras que la lambda (C.37), se registró en Perú a finales del año 2020. El ministerio de Sanidad español informó la detección de la cepa andina menor del 1%, a pesar que se han registrado varios brotes en Cantabria con más de 90 infectados.
De acuerdo con el ente de salud, la lambda es contagiosa y evade a las vacunas anticovid como la delta.
Sin embargo, esta tipo de mutación tiene la “capacidad de infección y de escape inmune incrementada versus los anticuerpos neutralizantes”, que fomenta la vacuna CoronaVac, de la farmacéutica china Sinovac, según un estudio realizado por el virólogo chileno Ricardo Soto Rifo.
