El exsacerdote francés Bernard Preynat confesó a un tribunal de su país que durante las casi cuatro décadas que ocupó el cargo, abusó de entre “cuatro a cinco niños” semanalmente y dio a entender su arrepentimiento por sus actos, en medio de un escándalo que fue ocultado por la Iglesia y que tiene indignada a la ciudadanía de esa nación.
“En la época, a mi entender no cometía agresiones sexuales sino que eran caricias, cariños. Estaba equivocado. Son las acusaciones de las víctimas las que me lo han hecho comprender”, manifestó Preynat de 74 años y juzgado en un tribunal de Lyon, al centro-oeste de Francia.
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El exsacerdote es acusado de haber cometido estos actos entre 1971 y 1991, cuando era capellán de los “boy-scouts” en Sainte-Foy-Lès-Lyon, una localidad cercana a Lyon. Estos hechos fueron ocultados por las autoridades católicas francesas y ocasionaron la condena contra el cardenal Philippe Barbarin en marzo de 2019 a seis meses de prisión condicional.
