El gobierno ruso juzgó la presión que ha impuesto la oposición boliviana a la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) que fue invitada por La Paz para desarrollar la auditoría vinculada a las elecciones presidenciales efectuadas el pasado 20 de octubre en Bolivia y que ha sido catalogada como fraudulentas por los opositores.
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La portavoz del ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, rechazó las “amenazas” que han expresado algunos miembros de la oposición boliviana al no querer admitir el resultado que arrojó la auditoría así como el llamado a destituir al presidente reelecto de la nación, Evo Morales.
Zajárova elogió la disposición del Estado para realizar esta auditoría, que fue solicitada por la oposición, y recalcó que Rusia se encuentra interesada en que Latinoamérica esté estable desde el punto de vista político y económico.
