Un grupo de manifestantes que protestaban a favor de la democracia atacaron algunos centro comerciales de Hong Kong. La policía usó gas pimienta e hizo múltiples arrestos.
Las protestas de flashmob y el vandalismo estallaron en varios lugares de la ciudad, ocasionando que los policías accionaran y controlaran la situación para que los disturbios no se salieran de control.
Durante los últimos seis meses Hong Kong se ha visto sumergida en protestas masivas a favor de la democracia, muchas de ellas decantaron en violentas batallas entre los policías y los protestantes.