Por ordenes del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se volverán a servir en los comedores de las escuelas de la nación pizzas, papas fritas y hamburguesas, acabando con los estándares nutricionales que impulsó la ex primera dama Michelle Obama.
Las nuevas reglas permitirán a las escuelas reducir la cantidad de verduras y frutas que debe incluir el menú escolar y les facilitará ofrecer más comida chatarra. Además, los colegios podrán disminuir la variedad de los alimentos frescos que se da a los estudiantes. La normativa fue dada a conocer por una agencia del Departamento de Agricultura, cuya responsabilidad es diseñar las comidas que alimentan a casi 30 millones de estudiantes en 99.000 escuelas.
El secretario de Agricultura, Sony Perdue, en un comunicado, indicó que, “las escuelas y los distritos escolares continúan diciéndonos que todavía hay demasiados desperdicios de alimentos y que se necesita una mayor flexibilidad para proporcionar a los estudiantes comidas nutritivas y apetitosas. Les hemos escuchado y nos hemos puesto a trabajar”, dijo
Cabe destacar que Trump tomó esa decisión en el cumpleaños de Michelle, que durante sus ocho años en la Casa Blanca tomó varias medidas para acabar con el problema de la obesidad infantil.
