El gobierno español suspendió el canje de la licencia de conducir con Venezuela debido a que no solventó una serie de problemáticas durante los últimos cuatro años, que incluye decenas de detenciones de venezolanos que presentan documentos falsos.
Entre sus razones, España sostiene que es una medida para “solventar la situación de inseguridad jurídica producida por las dificultades para determinar la autenticidad de los permisos de conducir venezolanos”.
El canje de licencias entre ambos países entró en vigor en el año 2005, pero según argumenta un comunicado oficial, los problemas en la aplicación del canje empezaron a surgir en 2017.
Ahora, España sostiene que, “una vez agotada la vía diplomática” y “tras no recibir respuesta por parte de Caracas”, se solicitó la suspensión definitiva del canje.
