Marbelys Sánchez es oriunda de Umuquena, una localidad al norte del estado Táchira, y se dedica a dar clases de primero a sexto grado en una escuela pública que está “abandonada” por falta de inversión de la Gobernación.
“No tenemos luz, agua, ni pupitres”, relató la maestra y explicó que, cuando hace mucho sol, deben sentar a los niños a un extremo del salón para que no les dé calor.
Conozca la historia de una profesora, oriunda del estado #Táchira, que ofrece clases a niños pese a las condiciones precarias de los servicios públicos. "No tenemos sillas, electricidad y agua", lamentó. #3Ago
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Pese a que ha recibido ayuda, como la donación de ocho computadoras y de un enfriador, no hay electricidad para usarlos. Por otra parte, la vía para llegar a la escuela está en mal estado y cada vez que llueve es imposible el acceso porque crecen las quebradas.
“Hemos estado en la escuela y las lluvias son tan fuertes que crecen las quebradas y salimos prácticamente en la noche “, agregó Marbelys.
Para la profesora, dar clases “es un acto de amor” porque no recibe un sueldo, sino que vive de vender pastelitos andinos. Se espera que el próximo 20 de agosto varias organizaciones lleven donaciones para que Marbelys continúe su labor.