Con 102 votos a favor y la abstención de la fracción 16 de julio, este viernes 5 de enero se instaló la nueva Junta Directiva de la Asamblea Nacional para el período 2018-2019, de acuerdo a lo establecido en los artículos 194 y 219 de la Costitución Nacional.
El diputado Julio Borges, traspasó la presidencia del Poder Legislativo a Omar Barboza, militante del partido político Un Nuevo Tiempo. Por su parte, la primera y segunda vicepresidencia fueron asignadas a los legisladores Julio César Reyes de Avanzada Progresista y Alfonso Marquina de Primero Justicia, respectivamente.
Al ser juramentado, Barboza indicó que el reto para este nuevo año dentro del Palacio Legislativo está enfocado en resolver la crisis que atraviesa Venezuela. “Esta designación no la interpretamos como un honor personal sino como una gran responsabilidad para con el pueblo venezolano”.
La propuesta para votar en el hemiciclo protocolar fue realizada por el parlamentario Juan Guaidó. Sin embargo, en el debate la fracción 16 de julio salvó el voto y aseguró que dentro de la nueva Junta Directiva hay diputados que favorecen al Gobierno Nacional.
“En nombre de la fracción parlamentaria 16 de julio salvo el voto a la propuesta del diputado Juan Guaidó. La fracción parlamentaria salva su voto porque voceros de algunas organizaciones políticas allí representadas tienen convivencia con el régimen”, dijo Omar González.
Entre tanto, el diputado Richard Blanco ofreció declaraciones en la que aseguró que la nueva Junta Directiva es “una parodia de diálogo en la que sólo gana el régimen”.
Descartó cualquier posibilidad para salir de la crisis pues, a su juicio, no está dentro de las prioridades de los diputados que presiden el Parlamento Nacional. “No es posible que las acciones se subordinen ante un diálogo que está condenado al fracaso”, aseveró.
