La periodista Gabriela Perozo, entrevistó este jueves en su programa Perspectivas al analista político Giberto Carrasquero, quien analizó la situación actual de Venezuela y sus perspectivas de cara al futuro.
“La primera inmigración venezolana que llegó con títulos universitarios fue recibida con los brazos abiertos, ahora que están saliendo por hambre la situación es más delicada. En este problema de geopolítica en el que entró Venezuela hay que entender que hay dos países como Rusia y China que se oponen a cualquier medida”, comentó.
“Se viene ejecutando un protocolo para que haya una intervención militar en Venezuela, ojalá se pueda resolver antes, pero vamos hacia esa dirección ineludiblemente. Los miembros de la oposición que se ocupan en rechazar cualquier intervención lo hacen porque solo piensan en seguir ocupando espacios políticos en un problema que no es solo político”, agregó.
“Creo que está planteada una coalición multilateral conjunta con países vecinos, hay militares venezolanos descontentos tanto fuera como dentro de Venezuela y están en contacto con todas las posibilidades”, afirmó.
“La de Venezuela es una situación inédita porque nunca en la historia un gobierno narcotraficante tenía el poder de un país que además tiene la mayor cantidad de reservas petroleras del mundo. Cuando se tienen cuatro millones de venezolanos regados por el mundo se trata de un problema del mundo. Los países que se han opuesto son socios del narcotráfico”, expresó.
“Me preocupa un poco la posición de México con López Obrador, no lo veo colocándose en la línea de Bolivia, pero lo veo moviéndose en una neutralidad típica de la política mexicana. El consenso de la región es que esto es una dictadura narcotraficante. No hay ninguna posibilidad para que ellos renuncien, ellos prefieren la muerte que la cárcel. Esta gente no se va a ir por las buenas”, garantizó.
“Se sienten una minoría que saben que los pueden linchar por todo lo que han hecho, ellos no van a tener el día después cuando se vayan. Venezuela es un país con cáncer que hizo metástasis. Detener el caos tendrá que tener altos niveles de autoridad. La segunda fase es la transición, hay que tener en cuenta a todos los que han estado en la lucha y no se puede construir el país excluyendo”, dijo.
“El movimiento a la democracia tiene que ser de menos de cinco años y el gobierno que lo asuma espero que tenga capacidad de amplia base para asumirla porque sino lo van a derrocar también. Mientras hubo dinero para que haya paz social no pasó nada en Venezuela. Todo el que vaya a poner dinero para salvar a Venezuela pondrá condiciones y se tendrá que implementar férreas políticas públicas”, acotó.
“Es importante que vayamos decantando el liderazgo. Nunca en la historia de la humanidad se había consumido el 50% de la economía de un país en cuatro años, se disolvió la moneda. En Venezuela los problemas se los tiene que resolver cada quien porque el gobierno no los va a resolver. La gente está al último nivel de sobrevivencia, el drama humano es terrible”, sentenció Carrasquero.
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