Sin el sentimiento que genera la presencia de feligreses, este domingo se llevó a cabo en La Asunción, capital del estado Nueva Esparta, la tradicional bajada de las palmas que celebra el Domingo de Ramos.
Ante la situación de pandemia, los actos propios de la Semana Santa que cumplen los católicos están también limitados, sin embargo un reducido grupo de la Asociación de Cargadores de Palma subió al cerro Copei y bajaron pequeños ramos.
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El Alcalde del municipio Arismendi, Alí Romero, recordó que este es el segundo año consecutivo que se suspende la Semana Santa, y dijo que aunque nuevamente faltó la algarabía acostumbrada, se cumplió la tradición para que la población se sienta alentada.
“No pudimos sentir el calor de nuestra gente en el Domingo de Ramos cuando inicia la Semana Santa. No escuchamos los aplausos que se sienten en la esquina del Consejo Legislativo a las 8 de la mañana, ni el aura que circunda a La Asunción este Domingo de Ramos, pero de alguna manera hacemos que la tradición no muera”.
