Patrizia Aymerich.- Si hubiera que ponerle un soundtrack a los hechos ocurridos el martes en la noche, cuando un helicóptero sobrevoló el Tribunal Supremo de Justicia en Caracas en un “ataque” del que aún titubean las versiones oficiales, quizás sería el tema “La verdad” de NK Profeta y Morodo o “Me niego” de DanyDayan.
El hombre que pilotaba la aeronave era Oscar Alberto Pérez. En la misión lo acompañaba un compañero encapuchado del que nadie ha hablado, pero que, vestido de negro, enarboló una pancarta que rezaba “350 libertad”, la otra gran consigna que se leía además de las grandes siglas del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas.
Desde entonces, la opinión pública se ha balanceado entre la sublevación en contra del gobierno de un grupo de funcionarios del organismo, o una situación montada por el Ejecutivo para detener al mayor general Miguel Rodríguez Torres por su supuesto vínculo con la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos. Otros opinan que el presidente de Venezuela buscaba una excusa para declarar el nivel dos del Plan Zamora. Pero estas solo parten de los comentarios enfrentados del Ejecutivo Nacional y la oposición venezolana.
Lo cierto es que no es la primera vez que Pérez aparece en la esfera pública. Lo hizo en 2015 cuando participó en Muerte suspendida, película del venezolano Oscar Rivas Gamboa, en la que interpreta a un miembro del equipo de investigadores (del Cicpc) que le sigue la pista a un grupo de secuestradores.
El filme fue, de hecho, idea original de Pérez, quien es un funcionario activo de las Brigadas de Acciones Especiales del Cicpc y jefe de Operaciones Aéreas, con 17 años de carrera policial, según relató Rivas Gamboa en una entrevista a Panorama, en 2015.
“El funcionario activo del Cicpc, Oscar Pérez, tenía la inquietud de realizar algo que rescatara los valores de la institución. Tuvimos algunos encuentros para hablar del tema hasta que nos reunimos con el comisario general José Gregorio Sierralta. A él le pareció oportuna la idea. Incluso sugirió que tocáramos el tema del secuestro”, contaba el director de la cinta, escrita por Carmelo Castro, sobre el que fue también co-productor de la cinta y que en 2015 fue llamado por los medios como “el James Bond venezolano”.
Pérez es también piloto, instructor de K9 (entrenamiento de perros policías) y parte de la fundación GV33 Moral y Luces, que realiza actividades para niños con condiciones especiales o enfermedades terminales, desde la que ha realizado donaciones y actividades de filantropía, de acuerdo con publicaciones que él mismo ha hecho en sus redes sociales, que para el momento de esta nota ya habían sido bloqueadas.
Justo después de conocerse el suceso en el que los tripulantes del helicóptero sobrevolaron el TSJ, Pérez publicó un video en el que afirmaba ser parte de un grupo de “guerreros de Dios” que exigía la renuncia de Nicolás Maduro y la realización de elecciones generales, “adheridos a los artículos 333 y 350 de la Carta Magna”.
Apenas una semana antes, el también actor por hobby se encontraba en Chirimena en en la filmación del video clip promocional de “La verdad”, tema del rapero NK Profeta y Morodo, cantante de reggae. “Si una mentira se repite mil veces, crece”, dice la canción.
En una conversación casual, Pérez reveló a algunos actores que conversaron con VPITV que estaba estudiando un nuevo papel que sería “el mejor” y que “saldría al aire la semana que viene”. Para el momento, el rol que interpretaba en el video clip era el de un enamorado.
La producción del audiovisual se debatía la noche del martes cuando y cómo lanzarían el material, en vista de los nuevos acontecimientos con uno de sus talentos.
Mientras tanto, el gobierno aseguró estar buscando aún a Pérez. El ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol afirmó que el hombre de 36 años de edad disparó más de 15 tiros en la azotea de ese organismo, donde se encontraban 80 personas en un “agasajo por el Día del Periodista”, aunque nadie registró el hecho. Luego, “atentó contra el TSJ con disparos y 4 granadas de mano” de las que Maduro dijo “explotó solo una”.
El helicóptero fue hallado al día siguiente en las costas venezolanas, en Vargas, sin señales de sus tripulantes.
El mandatario amenazó con “declarar el nivel dos del Plan Zamora”. “Ya están desplegadas todas las fuerzas especiales para capturar a este grupo y todo lo vamos a saber”.
Fuentes no oficiales afirmaron que el piloto estaría en este momento fuera del país.
Mira el video que circula en redes del momento en que helicoptero ataca con dos granadas sede del TSJ y Ministerio de Interior #Venezuela pic.twitter.com/IaxG53HegU
— Rolando Segura (@rolandoteleSUR) June 28, 2017
