Hoy se cumple un año desde que el joven Moisés Cordero perdió su ojo al momento que fue impactado por un disparo de la Guardia Nacional durante una protesta en Naguanagua, estado Carabobo para exigir el ingreso de la ayuda humanitaria a Venezuela.
El 23 de febrero de 2019 un grupo de estudiantes junto a una masa de personas pedían el ingreso de medicinas e insumos al país mientras protestaban en el Fuerte de Paramacay respaldando al grupo Médicos Unidos por Venezuela quienes querían entregar una carta de solicitud a la ayuda humanitaria.
Actualmente Cordero está necesitando un reemplazo de prótesis sin embargo lo cuenta con los recursos necesario para poder hacerlo.