Unos 33 hombres fueron presentados en audiencia ante el Tribunal Municipal Penal en Valencia, estado Carabobo, tras ser detenidos por la Policía Nacional Bolivariana durante un allanamiento en un local privado de la ciudad el pasado fin de semana.
Medios locales indicaron que el procedimiento se llevó a cabo en la urbanización Los Sauces, una vez que la policía recibiera una denuncia sobre posibles actos ilícitos cometidos en dicho local que funcionaba como un spa.
Por su parte, activistas de derechos humanos, organizaciones no gubernamentales y familiares exigen la libertad plena de los ciudadanos.
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Koddy Campos, activista de derechos humanos, denunció que el procedimiento policial constituye una violación a los derechos de la comunidad LGBTIQ+, debido a que los ciudadanos tienen derecho a la privacidad y a ejercer libremente su orientación sexual, al presumir que su detención se debió a la orientación sexual de los detenidos.
“Esto nos recuerda a los años 70 y 80 donde la persecución a homosexuales era el pan nuestro de cada día, nos preocupa que se haga un procedimiento como este, porque estaríamos volviendo a la Ley de Vagos y Maleantes, donde por el simple hecho de ser homosexual era motivo para que entraran, allanaran y te llevaran preso”, sentenció el activista.
“No han cometido ningún delito, estaban en un sitio privado y es un sitio que frecuenta la comunidad LGBTI, por lo que deben ser respetados y no expuestos al escarnio público”, expresó por su parte Eduardo Franco, presidente de la Fundación Manos Amigas por la Vidas (Mavid) y secretario general de la red venezolana Gente Positiva.
