La cantante Britney Spears volvió a la polémica mediática al desvelar en redes un par de anécdotas personales en las se arrepiente de no haber abofeteado su hermana y a su madre con el fin de que entraran en razón con el trato que le dieron en el pasado.
A través de un extenso post en su cuenta de Instagram, la artista explicó que hubo una temporada en la que su hermana, Jamie Lynn, pasaba el día viendo televisión o, en su defecto, sin hacer nada en un inflable de la piscina, acciones que la hicieron sentir como “un fantasma” tras su ruptura sentimental con Justin Timberlake, en 2002, debido a que nunca se sintió consolada.
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En lo que respecta a su madre Lynne, quien cayó en una profunda depresión tras su separación de Jamie Spears, la ingesta de medicamentos y su falta de actividad tanto física como mental la dejaron constantemente aletargada, lo que dificultaría su relación con su hija mayor.
“No era capaz de mantener una conversación, estaba hecha un desastre”, aseveró Britney.
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Como reflexión de sus recuerdos, la bailarina lamentó no haber actuado de otra manera en ese momento.
“Lo siento, Jamie Lynn, no fui lo suficientemente fuerte para hacer lo que debería haber hecho. ¡Abofetearte a ti y a mamá en sus malditas caras!!”, concluye el texto.
