Según la organización Cáritas de Venezuela, el 75% de la población en la nación suramericana recibe mensual un salario mínimo de $2, cifra que está muy por debajo del precio de la canasta básica que sobrepasa los $250.
En una nueva edición de Perspectivas con Gaby Perozo, la directora de esta ONG, Janeth Márquez, explicó de qué manera el programa podría ayudar a mitigar los efectos de la crisis económica y de seguridad alimentaria que hay en el país.
“En febrero de 2020 la desnutrición aguda, según Cáritas, en zonas muy deprimidas, en zonas muy pobres estaba en menos del 8.9% y en estos momentos en 13.6%, esto representa que hay una escasez de alimentos en la casa”, aseguró Márquez.
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Con la salida de los más de 5.000.000 de venezolanos a varios países del mundo, según Acnur, la situación de alguna manera “se estabilizó” por el envío de remesas pero esto también se vio afectado por la pandemia.