Al menos tres personas murieron y 17 resultaron heridas en el bombardeo ruso ocurrido el pasado miércoles contra un hospital infantil de la ciudad ucraniana de Mariúpol, en el suroeste del país, informaron las autoridades locales.
“Hasta la fecha se sabe que después del atentado terrorista del hospital infantil en Mariúpol por aviones rusos, unas 17 personas (entre niños, mujeres y personal sanitario) resultaron heridas”, según los datos del ayuntamiento que recoge la agencia Interfax-Ukraine.
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Entre los fallecidos se reportó a dos menores de edad, un niño y una niña, y entre los heridos también se encuentran menores y mujeres, además de personal sanitario del centro.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo que el bombardeo ruso contra la maternidad de Mariúpol es “la prueba final del genocidio” que se está cometiendo contra los ucranianos.
“Las bombas rusas cayeron sobre un hospital y un hospital de maternidad en Mariupol. El hospital de niños. ¡El hospital de maternidad que estaba en funcionamiento! Los edificios están destruidos”, dijo Zelenski.