Tras permanecer durante casi tres semanas cerradas por el terremoto del pasado 6 de febrero, las escuelas ubicadas al noroeste reabrieron este sábado, según lo informado por las autoridades locales.
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De acuerdo con lo relatado por los habitantes de ese punto de Siria, gran parte de los alumnos actualmente viven lejos de los planteles debido a que sus casas quedaron devastadas por el sismo, razón por la cual no acudieron a las aulas.
“Algunos estudiantes temían estar dentro del edificio y se sobresaltaban cada vez que escuchaban un ruido como el de un escritorio al ser arrastrado. Muchos estudiantes padecen miedo y ansiedad. Todavía están en shock”, dijo a Associated Press (AP) un vecino identificado como Abdulkafi Al-Hamdou.
Con relación a la actual situación con el sector académico en Siria, Ziad al-Omar, del departamento de Educación de la región, 39 maestros y 421 estudiantes murieron a causa del terremoto.
En cuanto a las infraestructuras, el funcionario precisó que unas 250 escuelas sufrieron daños, de las cuales 203 quedaron destruidas parcialmente . Otras 46, agregó, tenían grietas en las paredes.
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