En los últimos tiempos se ha visto el aumento de las llamadas fake news, un conjunto de datos y vertientes de contenido impulsados con el propósito de crear desinformación o tergiversar noticias, bien sea por aparatos no orgánicos o instituciones, e incluso personalidades, con gran alcance comunicacional.
Como parte de lo que implica ofrecer información genuina y contenido de utilidad para la audiencia, VPItv presentó el webinar ‘Fake news como instrumento para manipular la opinión pública’, de la mano de varios expertos en materia de caza de noticias falsas y verificadores para saber de qué forma se pueden identificar estos bulos.
Un elemento de importancia para identificar estas noticias falsas es diferenciar entre lo que es información errada y desinformación. El observatorio digital ProBox define que la primera se genera de forma fortuita por el impacto que tiene en quien la consume, infundida generalmente por rumores, mientras que la segunda es creada para hacer daño a otros, mayormente, con la intención de atacar de manera mediática.
Sobre esto último, la directora de ProBox, María Virginia Marín, afirma que una de las consecuencias de este fenómeno es la contaminación y sobresaturación informativa, con el propósito de crear en los internautas una necesidad de desconectarse, y así minimizar vertientes de opinión distintas a las que buscan imponer quien hace uso de la desinformación.
Marín destaca que en Venezuela existen casos particulares en los que la desinformación, mediante las fake news, ha logrado calar en gran dimensión, entre ellos los enfrentamientos en Apure, la presunta persecución a la prensa y las vertientes de información sobre políticos opositores.
Pero el impulso e imposición de estas tendencias de desinformación también contaría, precisa Marín, con un aparataje tecnológico. Esto, alertó, estaría generando un fenómeno de minimización del protagonismo de la opinión pública, bien sea por la sobreexposición y saturación de contenido como el abandono de la ciudadanía de estos espacios.
Estos son algunos #tips para poder identificar noticias falsas o #FakeNews y evitar compartir contenido sin verificar ⤵️ pic.twitter.com/1sWgDXwie1
— ProBox (@ProBoxVE) September 8, 2022
Una hidra camaleónica y policéfala
El aspecto oscurantista de las fake news las convierte en un fenómeno con distintas aristas que suelen ser difíciles de combatir. Sobre esto, el presidente de la Organización anti-desinformación “Cazadores de Fake News”, Adrián González, presentó durante el webinar realizado por VPItv varios aspectos, o propósitos que buscan alcanzar quienes utilizan este instrumento, entre ellos:
– Desinformar para estigmatizar a instituciones o personas, generalmente con gran exposición pública. Con esto, se busca crear en la audiencia el precepto de “si un periodista, medio u ONG recibe tanto desprecio, debe hacer hecho algo malo”.
– Desinformar para promocionar tendencias para masificarlas y apabullar otras. Dicha fake news buscaría hacer creer a quienes les llega que “mientras más gente lo comparta, más lógico es que sea verdad y más importante debe ser la información”.
– Impulsar rumores de manera coordinada, valiéndose de portales de noticias falsos, en casos puntuales, con el propósito de posicionar informaciones perniciosas.
– Infundir matrices de opinión y contaminar publicaciones, valiéndose de la masificación de comentarios con tendencias negativas, lo cual podría traducirse en “si tantas personas están opinando lo mismo, debe ser verdad”.
.@cazamosfakenews explica cómo en Venezuela también se crean portales que simulan ser medios de comunicación para intensificar la propagación de #FakeNews pic.twitter.com/ZZgW3jF7eJ
— ProBox (@ProBoxVE) September 8, 2022
Quiebres y reconstrucciones de paradigmas como herramienta de combate
Debido al efecto negativo psicológico, e incluso sociológico, que buscan quienes difunden las fake news, una de las invitadas al webinar, la psicóloga Ana María Schroh, plantea “armar una nueva estructura del pensamiento”, un quiebre y reconstrucción de paradigmas sobre las redes sociales como punta de lanza para que las personas puedan protegerse de los bulos.
A juicio de la experta, la difusión de los fake news busca fomentar en las personas el escepticismo y el desinterés de buscar información genuina, así como mantenerse en contacto con fuentes fidedignas. De de lograr las fake news su objetivo, advierte la especialista, se corre el riesgo de que los afectados creen una especie de “realidad” alterna, condicionada a la cantidad de información a la que tenga acceso.
Schroh insiste en que parte de esa reconstrucción de paradigma sobre las redes sociales es que no todo lo que se publica es real, por lo cual se debe injertar este precepto como un canon para hacer frente a la desinformación y sus efectos.
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