Con el propósito de captar el mayor volumen de divisas, a partir de este jueves el gobierno cubano incursionará en el mercado paralelo, cuyo tipo de cambio (120 pesos cubanos por dólar) quintuplica al oficial (24 pesos cubanos por dólar), mediante la compraventa con personas naturales y empresas privadas.
Esta acción del Ejecutivo de Miguel Díaz-Canel contempla no sólo la captación de dólares sino de euros, para el cual utilizaría un tipo de cambio de 122 pesos por dólar, quintiplicando también al oficial de 24,42.
El ministro de Economía de Cuba, Alejandro Gil, considera esta acción un “paso fundamental” para que el Estado pueda ofertar las piezas en un mercado cambiario cuya fecha de lanzamiento hasta ahora no ha sido revelada, y que no descarta ofrecer otras divisas además de la americana y la europea.
Gil agregó que con esto su gobierno busca “recuperar la capacidad de compra del salario en peso cubano”, llegar a un “tipo de cambio único” y atacar “el principal problema de la economía, que es la falta de divisas”.
En el marco de esta iniciativa, la ministra presidenta del Banco Central de Cuba, Marta Wilson, puntualizó que se aplicará un “margen comercial de compra”, que ubicará el intercambio final en un tipo de cambio de los 110 pesos cubanos por dólar.
Así como comprará, también venderá
Gil destacó que no se implementará un menudeo con el tipo de cambio oficial “porque se requiere de una cantidad de divisas de las que el país no dispone”, al tiempo que esto serviría como un “incentivo” para estimular las operaciones con el Estado, en lugar del mercado paralelo.
“El objetivo estratégico es que operemos la economía en moneda nacional pero con (…) capacidad de compra real. Hay un incentivo a cambiar esas divisas en el mercado informal y hay un nivel de divisas que está entrando en el país que no está siendo captado por el sistema bancario nacional”, precisó el titular de Economía.
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