Un cliente del Miami Squeeze, un local de jugos en el sur de la Florida, en Estados Unidos, dejó una propina de 2,021 dólares y una nota agradeciendo la labor al personal.
El pedido del cliente era de 71,84 dólares y los empleados se sintieron agradecidos por el gesto.
“La comunidad es nuestro negocio. Si no hay comunidad, entonces no podemos permanecer abiertos, y estamos muy agradecidos de tener a todos estos excelentes clientes nuestros, que se convirtieron en familia en este momento”, dijo uno de los trabajadores.