Albergues de la frontera norte de México se preparan para un incremento en la llegada de migrantes ante el fin del Título 42 de Estados Unidos el próximo jueves, un hecho que muchos perciben como una oportunidad para cruzar.
En Ciudad Juárez, en la frontera con la ciudad estadounidense de El Paso, Texas, se estima que se albergan más de 35.000 migrantes, con cientos de ellos que duermen en las calles, donde algunos trabajan en la informalidad limpiando vidrios o vendiendo dulces.
Un ejemplo de la situación es «El buen samaritano», un refugio que en febrero pasado
incrementó su capacidad de 50 a 180 personas ante la creciente presencia de migrantes.
Lea también: Presentan cargos contra el responsable del arrollamiento de migrantes en Texas
«Es probable que incrementen los flujos migratorios, esta situación se va a poner compleja y probablemente algunos grupos (de criminales) se aprovechen para cruzarlos ilegalmente», expuso a EFE Juan Fierro, director de «El buen samaritano».
Por su parte, el presidente azteca, Andrés Manuel López Obrador, negó que México afrontará un mayor ingreso de migrantes ante el fin del Título 42.
«Con la información que se está dando, nosotros pensamos que no va a aumentar el flujo migratorio, porque se está abriendo una opción, una alternativa», declaró en su rueda de prensa matutina del viernes pasado.
Pero la desesperación abunda entre los migrantes varados en la frontera, quienes aseguran afrontar obstáculos para acceder a las vías legales para lograr ingresar a Estados Unidos.