Ocho personas murieron luego que un avión antiincendios que intentaba sofocar los incendios registrados en Turquía se estrellara la tarde de este sábado. La aeronave, de propiedad rusa, chocó en el sudeste, según informaron las autoridades locales.
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El avión, de modelo Be-200 bimotor, había sido enviado el mes de julio por parte del Ejército ruso para apoyar a sus aliados contra las llamas, las cuales consumieron gran parte del país.
El ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, lamentó este suceso a través de su cuenta en la red social Twitter, resaltando que eran unos “héroes”.
Por el momento se desconoce el motivo concreto por el que el avión se estrelló. Las autoridades iniciaron una investigación para determinar si fue un error humano o si la aeronave presentó alguna avería.
