El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ingresó al Congreso Nacional, escoltado por militares y policías, para hablar de un polémico préstamo para financiar un plan de seguridad en contra de las bandas delictivas.
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Bukele ordenó a los diputados que llevaran a cabo una sesión extraordinaria para aprobar 109 millones de dólares asignados por el Banco Centroamericano de la Integración Económica (BCIE).
El mandatario desde el pasado viernes hizo un llamado a los ciudadanos para que se presentaran este domingo en la sede de la Asamblea Legislativa, como método de presión para que autoricen el préstamo que todavía no ha sido respaldado por los miembros la Comisión de Hacienda, quienes afirmaron que el Ejecutivo no ha explicado lo que hará con el dinero.
