La Unión Europea (UE) ejecutará un embargo de armas a Venezuela y contemplará la opción de imponer otras sanciones selectivas contra los funcionarios chavistas responsables de la represión en la última ola de protestas antigubernamentales, luego de un acuerdo político alcanzado este miércoles de manera unánime por los embajadores de los Veintiocho.
El siguiente paso para esta sanción es que los ministros de Exteriores comunitarios den su visto bueno en el Consejo del próximo lunes a estas sanciones, que consisten, además del embargo de armas, en un veto a las exportaciones de equipos que puedan ser utilizados “para la represión interna” o para “vigilar” las comunicaciones electrónicas.
Las otras medidas selectivas contra los responsables de la represión se llevarán a cabo si la UE decide ejecutar la “base legal” para realizar una lista con los nombres de las personas inmiscuidas, quienes tendrían prohibido en ese caso viajar a territorio comunitario, y verían además congelados los bienes que tengan en los países miembros, “si la evolución de la situación lo requiere”.
El acuerdo lo firmó este miércoles el Comité de Representantes Permanentes (Coreper) de la UE, en el que están representados todos los Estados miembros a través de sus embajadores.
Este cuerpo remitirá a continuación los documentos legales para esta decisión a los ministros, que se espera los adopten el lunes en su reunión como un punto sin debate en su agenda.
Estas sanciones serán graduales, selectivas, flexibles y reversibles, recalcaron fuentes comunitarias a la agencia EFE, quienes insistieron en que no están concebidas para afectar a la población venezolana en general.
Su objetivo es, dijeron, impulsar un proceso creíble y significativo, que pueda conducir a una solución pacífica negociada en el país.
Además, avanzaron que los ministros comunitarios esperan también adoptar unas conclusiones sobre Venezuela el lunes.
En ellas, está previsto que el Consejo reafirme que un diálogo constructivo y la negociación son la única vía sostenible para hacer frente a la actual crisis, y responder a las necesidades acuciantes del pueblo venezolano.
Al mismo tiempo, se espera que los ministros vuelvan a ofrecer la disposición de la UE para respaldar una negociación creíble en el país, que implique a todos los actores relevantes, de cara a que logren soluciones para los múltiples desafíos a los que se enfrenta Venezuela.
En octubre, los países de la UE ya habían llegado a un acuerdo político para preparar sanciones selectivas contra personalidades venezolanas, consideradas responsables de “represión” en ese país.
