Murió Rafael Ángel González Araujo, el venezolano que cuidaba motos en el centro de Jamundí, luego de sufrir graves heridas por el atentado de una motobomba en el departamento de Valle del Cauca, Colombia, el pasado 12 de junio.
El hombre de 57 años había llegado a la clínica en un estado de salud delicado “con fractura expuesta de fémur y múltiples heridas por esquirlas, con trauma toracoabdominal penetrante, quemadura grado II en cara, cuello, tórax, abdomen, vía área, con evisceración. Fue trasladado a quirófano de forma emergente”, indicó el informe de Valle del Lili.
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A González recientemente también le tuvieron que amputar uno de sus brazos debido a una bacteria en su cuerpo por las múltiples heridas, informó el personero de Cali, Gerardo Mendoza.
Posteriormente, se dio a conocer el fallecimiento del venezolano.
«Lamento profundamente lo ocurrido, como personero de Santiago de Cali. Hicimos institucionalmente todo lo que estaba a nuestro alcance, tratando de auxiliar, de socorrer, de brindar un espacio de aliento, de afecto. El deceso de don Rafael no deja de enlutar a la región, especialmente, el país, porque si bien don Rafael era un venezolano que llegó a Colombia en busca de esperanzas, en busca de vivir y encontró la muerte”, manifestó Mendoza en un comunicado.
Gerardo Mendoza Castrillón, Personero Distrital de Santiago de Cali, lamenta profundamente el deceso del señor Rafael González. En su calidad de representante del ministerio público, hace un llamado insistente para que la población civil se mantenga al margen de toda… pic.twitter.com/8EoTsUF1Iy
— Personería de Cali (@personeriacali) June 25, 2024
De acuerdo con el diario El Tiempo de Colombia, la infección que provocó la eliminación de uno de los brazo del venezolano se extendió por su cuerpo con riesgo de amputar ambas piernas, así como le afectó el estómago. Estaba con ventilación mecánica y el pasado 24 de junio fue desconectado. Falleció en la madrugada de este 25 de junio.
Durante los últimos cinco años, el venezolano Rafael Ángel González Araujo se había desempeñado como cuidador de motos. Cuando no estaba vigilando, buscaba su sustento diario con la venta de dulces o escarbando material reciclable en las calles de Jamundí.
Su hijo, Ángel González, indicó que su padre buscaba trabajar, pensando en su familia y que esperaba verlo salir de la clínica para abrazarlo, nuevo.
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De las otras dos personas heridas, se conoce que fueron remetidas a las misma clínica y ambos se encuentran «estables y en observación».
Ante la noticia de González, el alcalde de Cali, Alejandro Eder, exigió «contundencia militar» por los hechos ocurridos.
«¿Y quién va a pedir perdón por el vil asesinato de don Rafael Ángel González? Colombia no puede ahorrar esfuerzos contra los terroristas. Contundencia militar es lo que exigimos. No es aceptable que estemos volviendo a esas épocas. ¡Duele!», señaló en la red social de X.
¿Y quién va a pedir perdón por el vil asesinato de Don Rafael Ángel González?
Colombia no puede ahorrar esfuerzos contra los terroristas. Contundencia militar es lo que exigimos. No es aceptable que estemos volviendo a esas épocas. ¡Duele! 🇨🇴 https://t.co/ewdShvA56a
— Alejandro Eder (@alejoeder) June 25, 2024
