Una pieza escultórica del Rey Emérito Juan Carlos I apuntando con un rifle de caza al icónico monumento madrileño del Oso y el Madroño fue instalada por un artista chileno en el corazón de la capital española.
«El monumento madrileño lo conecto con la monarquía española para hacer una parodia al símbolo de la ciudad. Pero al final todo tiene que ver con el lenguaje visual», explica el artista, cuya obra sorprendió a miles de transeúntes por su polémica propuesta.
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La figura de 170 centímetros y hecha de poliuretano y masa de modelar fue colocada sin permiso de las autoridades y tras su breve estancia en la Puerta del Sol, viaja ahora a una exposición que el artista tiene en el centro cultural La Parcería, en Arganzuela.
El autor explicó en una nota de prensa que muchos españoles relacionan al Emérito con «una lujuriosa vida privada y con su afición a la caza de animales en peligro de extinción como bisontes, elefantes y osos».
Por eso, Miranda ha tratado de «ridiculizar la figura del monarca» con esta obra, cuyo nombre es ‘Estrategias parasitarias para la sobrevivencia en un mundo cruel’.
