El Tribunal Supremo de Estados Unidos aprobó este jueves el derecho a portar armas, pese a las iniciativas impulsadas por el gobierno de Joe Biden con relación al tema debido a los recientes tiroteos en el país.
Tras conocerse el fallo, el presidente estadounidense afirmó sentirse “profundamente decepcionado”, y afirmó que la moción aprobada por la instancia judicial “debería preocuparnos profundamente a todos”.
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La resolución fue aprobada con seis votos a favor y tres en contra. Quienes no la apoyaron indicaron que esta “puede tener consecuencias letales”.
California, Delaware, Hawái, Maryland, Massachusetts, Nueva Jersey y Rhode Island son varios de los estados en los que la resolución puede tener implicaciones.
Desde el Partido Demócrata abogan por prohibir la venta de rifles de asalto, así como revisar los antecedentes de los compradores de armas. Por su parte, los republicanos y afirman que los tiroteos deben ser tratados como un tema de salud mental.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, calificó de “día negro” el fallo, y afirmó que se trata de algo “absolutamente terrible”, mientras que desde la Asociación Nacional del Rifle celebraron el dictamen.
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