La pobreza extrema es una realidad que viven muchos de los ciudadanos venezolanos, esa es el caso de Lauren Díaz, una madre soltera, que lucha día a día para poder subsistir junto a sus tres hijos en el estado Nueva Esparta.
Hace tres años Díaz, quien es oriunda del estado Aragua, pasó por una tragedia, y es que su hija de dos años perdió la vida por haber consumido yuca amarga.
“Sacamos la yuca, todos comimos, a todos nos hospitalizaron, pero la única que falleció de nosotros fue mi hija”, contó la mujer quien decidió mudarse a la isla para recuperarse y buscar estabilidad.
Su vida no cambió mucho pese a que tiene un trabajo, Lauren y su familia viven en una casa que no está en condiciones para ser habitada, ya que hace poco tiempo se cayó un árbol sobre la misma y destruyó parte de la estructura.
“Tengo un sueldo que no es muy concorde con todo lo que yo hago pero bueno. No tengo cocina, no tengo ventilador, no tengo nadie que me ayude, mi familia vive aquí pero cada quien por su lado”, aseguró Díaz.
La madre soltera gana $30 mensual y con ello hace “magia” para poder mantener a sus hijos, quienes se quedan solos mientras ella va a trabajar. “Todos los días les digo ´mira hijo yo salgo a trabajar porque yo no tengo como sostenerlos, no los dejo solos porque yo quiero, porque si yo no trabajo nos vamos a morir de hambre´”.
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Aunque vive una mala situación, Lauren no pierde la fe en que su futuro y el de sus hijos será diferente. “Todo lo que yo he pasado lo sabe Dios y él sabrá en el momento y el lugar donde me va a poner y todos los días le pido a él, por mis hijos, por mí”, afirmó.
