Bonilla logró construir su hogar gracias al sueldo que él y su esposa devengaban como obreros en el Hospital Central de San Cristobal. Ahora, cada vez que llueve sienten el temor de perder todo su esfuerzo.
“Yo tengo de vivir aquí más de 35 años, este terreno me lo asignó a mí la alcaldía”, aseguró el hombre. Su casa tiene la estructura completamente deteriorada, las columnas y el piso.
Lea también: En Barquisimeto: Murió menor de edad por mordedura de serpiente
Yajaira Ramírez es otra de las vecinas que está pasando por la misma situación, la casa era de su abuela, quien falleció hace dos meses y se llevó el sueño de poder “verla arreglada” nuevamente.
“Ya se han caído las paredes y pues aquí están fuerte la cosa, pero no tenemos otra parte donde vivir”, explicó Ramírez.
