La empresa Kellogg’s presentó una demanda contra Venezuela por arbitraje de inversiones ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (Ciadi), pues señala que se está haciendo uso indebido de su marca en ese país.
En la demanda, Kellogg’s alegó el “incumplimiento del Tratado Bilateral de Inversiones Venezuela – Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del norte de 1995”, después que el gobierno se apropiara de su planta de producción de alimentos registrada en Venezuela.
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Debido a la crisis económica que empañó al país, Kellogg’s tomó la decisión de abandonar sus operaciones en 2018 y la respuesta del oficialismo fue apropiarse de sus activos y cedió la producción de cereales a sus trabajadores.
“La empresa se la hemos entregado a los trabajadores y está produciendo con la clase obrera industrial. El pueblo tiene un presidente y un Gobierno que lo protege y Kellogg’s va a seguir produciendo, ahora en manos de la clase obrera”, fue la respuesta de Nicolás Maduro para aquel momento.
En octubre de 2019, Kellogg’s denunció a través de un comunicado la expropiación de sus activos y el uso indebido de su marca en Venezuela y advirtió que tomaría acciones legales pertinentes al resaltar que no había autorizado el uso de su marca en el país.
Para 2020 otra infracción sorprendió a la empresa, y es que el gobierno venezolano modificó la imagen impresa en la caja de cereales Corn Flakes, uno de sus principales productos, al incluirle una mascarilla al gallo que caracteriza la marca.
Kellogg’s se suma a una larga lista de multinacionales que han denunciado a Venezuela en el sistema jurídico internacional, en su mayoría motivadas a las expropiaciones de sus activos en el país.
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