La Procuraduría General de Colombia determinó que el estudiante identificado como Dilan Cruz, de 18 años, murió por un disparo de una escopeta calibre 12 utilizada por el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) durante las protestas contra el gobierno de Iván Duque en la ciudad de Bogotá. Cruz, fue la primera víctima fatal de las manifestaciones tras ser golpeado por una bolsa con “múltiples perdigones de plomo” utilizada para dispersar a los ciudadanos.
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“Los hallazgos de necropsia permiten afirmar que la muerte del joven es secundaria al trauma craneoencefálico penetrante ocasionado por munición de impacto disparado por arma de fuego, lo cual ocasiona severos e irreversibles daños a nivel de encéfalo”, detalló la directora del Instituto de Medicina Legal, Claudia García, a la prensa.
Asimismo, García destacó que la información forense y balística será entregada a Fiscalía General de la Nación este jueves, para que determinen cuáles serán las medidas que tomarán contra el grupo armado.
El procurador general de Colombia, Fernando Carrillo, rechazó este tipo de actos en las manifestaciones, y resaltó que debe ser “irrepetible” una situación como esta, haciendo énfasis en la crisis social que vive Chile, y donde más de 23 personas han muerto por los enfrentamientos con la policía.
