El futbolista brasileño Dani Alves fue detenido este viernes en la comisaría de los Mossos d’Esquadra de Les Corts de Barcelona, España, tras acudir a declarar por presuntamente agredir sexualmente a una mujer en una discoteca el pasado 30 de diciembre.
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Alves, que en la actualidad juega en los Pumas del fútbol mexicano, fue a declarar voluntariamente y negó ser responsable de haber supuestamente tocado a una mujer debajo de la ropa interior, sin su consentimiento.
Sin embargo, salió arrestado en una patrulla policial para comparecer ante la juez instructora del caso en calidad de investigado en la Ciudad de la Justicia de Barcelona, según la prensa internacional.
La denuncia fue formalizada el pasado 2 de enero cuando una mujer, acompañada de sus amigos, informó de lo sucedido al personal de seguridad de la discoteca, que en ese momento activó el protocolo del ayuntamiento contra las agresiones y los abusos sexuales en espacios de ocio nocturno privado y avisó a la Policía catalana.
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