Los trabajadores de Twitter abandonaron de manera masiva sus cargos, luego de un ultimátum enviado por Elon Musk, propietario de la red social, en el que les exhortó a cumplir con jornadas laborales más extensas.
En el mensaje reseñado por The Washington Post, Musk expresó lo siguiente a los destinatarios: “En el futuro, para construir un Twitter 2.0 rompedor y tener éxito en un mundo cada vez más competitivo, tendremos que ser extremadamente duros. Esto significará trabajar muchas horas a gran intensidad. Solo un rendimiento excepcional constituirá un aprobado”, enfatizó.
Las personas que no respondieran el mensaje antes de las 17:00 horas (en el huso horario del Este de Estados Unidos) quedarían despedidas y recibirían una indemnización de tres meses, mientras que quienes estuvieran dispuestos debían ingresar al formulario adjunto en el que tenían que pulsar en un sí.
Ante dicha situación, cientos de empleados optaron por abandonar la empresa antes de la hora plazo. Estos se suman a los más de 3.000 trabajadores que Musk despidió a la semana de haber asumido la compañía.
