El presidente de Perú, Pedro Castillo, será investigado por la fiscalía de ese país tras ser señalado de presuntamente encabezar “una organización crimilar”, y a través de la cual habría obtenido “beneficios ilegales” de contratos.
“Es la primera vez que un presidente en funciones ha sido sindicado de liderar una organización criminal enquistada en los estamentos del Estado” a los que juró defender al asumir el cargo, para “cometer delitos de corrupción”, aseguró el representante de la Fiscalía de la Nación, Samuel Rojas.
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El procedimiento contra el mandatario peruano, señaló Rojas, es una respuesta a la demanda de “tutela de derechos” presentada por el abogado de Castillo, Benji Espinoza, para anular este proceso.
Paralelamente, el congreso de Perú también acordó investigar a Castillo por presunto “tráfico de influencias”, según lo informado por el presidente de la Comisión de Fiscalización, Héctor Ventura.
“Hemos decidido pasar a la condición de investigado al presidente Pedro Castillo con el fin de señalar posibles responsabilidades penales en el informe que vamos a emitir (…) Existen grandes indicios y sospechas reveladoras de presuntos actos de corrupción”, sentenció el congresista.
