La situación económica generada por la pandemia de la covid-19 en España sigue requiriendo de urgentes medidas que ayuden a paliar la realidad de la población más vulnerable. Una de las medidas consideradas en este contexto es facilitar el acceso al ingreso mínimo vital con el objeto que llegue a quienes han caído en pobreza crítica.
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En tal sentido, el Gobierno aprobó en el Consejo de Ministros modificar algunas condiciones, básicamente requisitos, en lo que se refiere al acceso al ingreso mínimo vital y, con ello, ampliar los beneficiados.
José Luis Escrivá, ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, dijo que los cambios fundamentales están dirigidos al concepto de unidad de convivencia, ya que se han evidenciado problemas con personas con residencia itinerante, es decir, sin hogar fijo y con la definición de unidades de convivencia cuando se comparte la vivienda.
Estas debilidades han llevado a negar por lo menos 60.000 peticiones del ingreso mínimo por incumplir la acreditación de la unidad de convivencia.
Otras modificaciones importantes son facilitar el acceso al ingreso mínimo de personas que viven en hogares colectivos, como albergues, residencias de carácter no permanente registrados como casas de acogida.
También podrán ser beneficiarios quienes vivan en situación de convivencia transitoria, para lo que se ha introducido el concepto de unidad de convivencia independiente (familia nuclear) en casos de violencia de género, divorcio, separación y desahucio o inhabitabilidad.
Esta especificación es para corregir casos como pérdida del hogar por divorcio, en el que una de las partes pasa a vivir de forma temporal en una vivienda de un tercero, y eso afecta los límites del ingreso mínimo.
