La venta de migrantes latinoamericanos en Estados Unidos se ha convertido en la nueva industria de la “esclavitud moderna”, debido a la existencia de grupos criminales que se dedican a trasladar a personas al otro lado de la frontera y venderlas para realizar trabajo forzado, informó el portal web Milenio tras una investigación en documentos judiciales.
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Estos informes relatan que los grupos delictivos han registrado más de 200 millones de dólares en ganancia durante los últimos cuatro años, teniendo como último registro la venta de 30 personas por 21.000 dólares a unos rancheros en Indianápolis, lo que significa un valor de 700 dólares por trabajador.
En cuanto al modus operandi que utilizan estos grupos criminales, los documentos detallan que luego de cruzar la frontera, suelen robarles identificaciones, papeles personales y recaban información sobre sus familias en México u otros países para luego amedrentarlos y que no escapen.
Hasta la fecha han sido detectados y procesados 34 líderes de los grupos criminales que comercian con migrantes. La mayoría de estos actos se han registrado en campos de Georgia, Texas, Wisconsin y Florida.
