Para el año 2022 podría haber un déficit mundial de jeringas debido a la demanda de esta para suministrar vacunas para la covid-19, de acuerdo con las cifras reveladas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Unas dos mil inyectadoras menos podrían fabricarse con el ritmo actual, de cara a la demanda de este insumo para suministrar medicamentos intramusculares e intravenosos.
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“Estamos planteando la preocupación real de que podamos tener una escasez de jeringuillas, lo que a su vez provocaría graves problemas, como la ralentización de los esfuerzos de inmunización. Dependiendo del suministro de vacunas, podría haber un déficit de entre mil a dos mil millones”, dijo la asesora principal de la OMS en materia de acceso a los medicamentos y productos sanitarios, Lisa Hedman.
Ante este escenario, Hedman exhortó a los países a incrementar su capacidad de producción de jeringas, necesarias para la vacunación. De lo contrario, esto último podría sufrir un retraso en la administración incluso de las vacunas rutinarias.
Un recuento hecho por agencias de noticias internacionales señalan que se han administrado más de 7.250 millones de dosis de la vacuna contra el covid-19 en todo el mundo. Esta cifra se traduce en casi el doble del número de vacunas que se administran al año, y el doble del número de jeringuillas necesarias.