De acuerdo con un informe entregado por la Oficina de los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las autoridades policiales de Colombia abusaron del uso desproporcionado de la fuerza durante el Paro Nacional.
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Según la ONU y la documentación de los hechos entre el 28 de abril y el 31 de julio, “hay razones fundadas para sostener que en el contexto del Paro Nacional, se habrían cometido violaciones a los derechos humanos, tales como el uso innecesario o desproporcionado de la fuerza que resultaron en privaciones arbitrarias de la vida y las violaciones a la integridad y seguridad personal, así como las detenciones arbitrarias, la violencia sexual y de género, y actos de discriminación y racismo”.
La misiva añadió también que “en algunos de estos casos, las víctimas eran indígenas y afrodescendientes, periodistas y personas defensoras de derechos humanos”.
El dosier destacó que la Oficina de Derechos Humanos alegaciones de muertes de 63 personas en el contexto de las protestas y que, a la fecha, ha verificado 46 decesos, de los cuales 44 eran civiles y dos eran policías. De las muertes documentadas, el 76 % de las víctimas murieron por heridas de bala.
La ONU recomendó a las autoridades colombianas reformar su “forma de gestionar las protestas para evitar más pérdidas de vidas y más personas heridas como ha sucedido durante las manifestaciones masivas que tuvieron lugar a partir de abril de este año en el contexto del Paro Nacional”.
