Formado por asesores del gobierno de Estados Unidos, un panel médico de expertos se reunirá para decidir si autoriza en niños de entre cinco y once años la vacuna contra la covid-19 de Pfizer/BioNTech.
De lograr la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), el fármaco será administrado en una población infantil de 28 millones dentro de ese rango de edad. Los científicos indicaron que los beneficios superan el eventual peor efecto secundario para este grupo de edad: la miocarditis, o inflamación del corazón.
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“Mi opinión inicial es que los beneficios de vacunar a los niños de cinco a once años superan los riesgos de miocarditis y otras preocupaciones de seguridad que la gente pueda tener. Por supuesto, (queremos) protegerlos, pero también que no transmitan el virus”, dijo el pediatra del Centro Médico Infantil Cohen de Nueva York, Henry Bernstein, a medios internacionales.
La FDA compartió un estudio de Pfizer que mostraba que la vacuna no presentaba problemas de seguridad graves con dosis de 10 microgramos, en lugar de los 30 inoculados a los grupos de más edad, y tenía una eficacia de 90,7% para prevenir el covid-19 sintomático.
Sólo se han detectado, ha dicho Pfizer, casos muy raros de miocarditis en adolescentes después de que se autorizara la vacuna en junio y se administrara a millones de personas de esa franja etaria. Los científicos prevén aún que será más rara entre los niños más pequeños, pero habrá certeza hasta que se autorice.
