El presidente de Perú, Pedro Castillo, propuso la aplicación de “medidas drásticas” mediante la castración química contra los violadores de menores en todo el país, motivado a la conmoción que se vive tras el secuestro, tortura y violación contra una niña de tan solo tres años.
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“Los crímenes de violencia sexual contra los niños y niñas no serán tolerados por este gobierno ni quedarán impunes”, expresó el mandatario a través de un comunicado.
Castillo enfatizó que este hecho ocurrido en la ciudad de Chiclayo “lleva a una enorme reflexión como país para adoptar políticas públicas de Estado más severas que salvaguarden los derechos humanos de los más indefensos, que son nuestros niños y niñas”.
“La castración química es una opción, no podemos esperar más” destacó, mientras instaba al Congreso a que este castigo sea incluido en el Código Penal.
El presidente sostuvo que esta medida es aplicada en otros países como Rusia, Polonia, Corea del Sur, Indonesia y Moldavia y en siete estados de Estados Unidos.