De acuerdo con el Reporte Mundial de Malaria 2021 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Venezuela se mantiene como la nación con los mayores índices de malaria en América Latina.
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En año pasado la nación sudamericana registró 232.000 casos de malaria y paludismo, una cifra menor a lo que alcanzó en 2019 cuando contabilizó 467.000.
La OMS destacó que la reducción de contagios se debió a las normativas impuestas por la covid-19 y a la escasez de gasolina, ya que afectaron a la industria minera, considerada como la principal contribuyente de la enfermedad.
Entre los años 2000 y 2020 los casos de malaria en la región descendieron de 1.5 millones a 0.65 millones, lo que representa 58%.
Mientras que la tasa de mortalidad por estas enfermedades se redujo de 0.8 a 0.3 muertes por cada 100.000 habitantes en riesgo.
En total las muertes por malaria disminuyeron un 56% (de 909 a 409).
“Tres países de la región -Brasil, Colombia y Venezuela- representan aproximadamente el 77% de todos los casos en la región”, indicó el informe.
Desde el año 2000 hasta el 2019, los casos de malaria en Venezuela aumentaron de 35.000 a 467.000.
