El Carnaval lo conocemos como una de las celebraciones más significativas en los países de América Latina y Europa que se dan a lo largo del año y muy vinculada, además, con la Cuaresma. Es una época de disfraces, celebraciones y carrozas, en que lo más pequeños y los más grandes salen a las calles para disfrutar de los desfiles, pero ¿cuál es el verdadero significado de estas fechas y cómo se originó?
En su origen más primario, los pueblos egipcios, de hace más de 5.000 años, los fueron popularizando como una fiesta pagana para honrar a Baco, conocido como el Dios del vino. Pero actualmente es celebrado en el mes de febrero y hace referencia a culturas, creencias y tradiciones. Se dice que el nombre proviene del término latino carnem levare, que se relaciona con abandonar la carne o “adiós a la carne”.
Inflación venezolana en Carnaval
Además de ser el primer puente vacacional del año, los venezolanos buscan distraerse en los puntos turísticos del país. No obstante, para varios economistas, la hiperinflación en Venezuela continuará durante el año 2020 mientras no se motive la producción nacional y se priorice la importación de materia prima para reactivar la industria.
El régimen de Nicolás Maduro, por medio de redes sociales dio a conocer, el pasado 20 de febrero, lo que sería el “Bono de Carnavales”, de Bs. 300 mil. Es decir, cuatro dólares al cambio que no alcanza para disfrutar parte de una cena familiar en esos días.
Lee también: Maduro decretó este viernes día de asueto nacional por Carnavales
Asimismo, tampoco alcanzaría para aplicar las tradiciones venezolanas en esta fecha como disfrazar a los más pequeños en las comparsas de calle. Pues, estos trajes tienen un valor de 23 dólares hasta 100.
Por otro lado, desayunar en estas vacaciones tienen un costo de aproximado Bs. 120 mil sin bebida.
Con respecto a los lugares turísticos, las posadas son las más solicitadas. La tarifa mínima se encuentra en al menos $25 para una noche, es decir, casi 2 millones de bolívares. Ahora bien, si los gustos del turistas son más exigentes, un noche en un hotel de categoría promedio puede ubicarse cerca de 175$ como mínimo.
Guerra de bombas de agua
Tras el poco suministro de agua en todos los sectores del país, los venezolanos han buscado solventar la escasez comprando tobos y llenándolos del líquido para luego llevarlo a sus hogares. Sin embargo, para una minitemporada vacacional, esta situación hace de los días una travesía completa para cada uno.
Esos tiempos en que los niños y hasta adultos llegaban a sus casas mojados, o como le llamamos en Venezuela, “empapados”, víctimas de una divertida pelea de bombitas de agua, parece ser parte del pasado, ya que los racionamientos aún perduran.
Las celebraciones más reconocidas dentro del país se dan en lugares como Carúpano, Cumaná, Coro, Mérida, Barquisimeto, Maturín y El Callao. Este último, ubicado en el estado Bolívar, fue declarado como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
Lee también: Al menos 400 familias son afectadas por aguas residuales en la comunidad La Mata
Se puede decir que el corazón del Carnaval en El Callao es el calipso, un género contagioso y particular que marca el ritmo de esta fiesta y se extiende por hasta por dos meses. En las comparsas se pueden ver personajes como los “mediopintos”, jóvenes que divierten al público embadurnando con hollín a los que se niegan a contribuir con un pago, de allí su nombre: ¡medio o te pinto!. También se encuentran los “mineros”, que rinden honores a los trabajadores que identifican la región y los famosos “diablos”, que son personajes enmascarados que bailan blandiendo un látigo para mantener el orden durante la comparsa.
En Maturín, estado Monagas, el Carnaval es celebrado con el famoso Rey Momo, un personaje proveniente de la cultura griega que ha creado fama alrededor de América Latina, en que familias, colegios y todas las comunidades participan en las principales avenidas junto a las comparsas para elegir al rey y la reina.
En el occidente de Venezuela, en Barquisimeto, estado Lara, las carrozas en cada parroquia, los conciertos y los desfiles, se adueñan de las calles desde el 2000. Así es como en cada rincón de Venezuela tiene una forma única y especial de conmemorar estas fiestas, la cultura, euforia y calor de su población harán que bajo cualquier situación sean temporadas inolvidables.
