Si eres de los que creen que todas las personas son potenciales consumidores de lo que ofreces, te equivocas.
Toma en cuenta que además de satisfacer necesidades específicas, debes aportar valor a tu comunidad y hacer que tu propuesta sea útil; para eso, necesitas una estrategia conversacional que te ayude a escuchar al público y a tocar puntos de dolor.
A partir de allí, podrás definir audiencias y crear el discurso adecuado, según las características de cada grupo.
Sé directo al hablar y segmenta
En este contexto, la especialista en gestión y optimización de neurocontenidos, Yanixia Sánchez, entrevistada en el programa Negocios y Marcas, destacó la relevancia de la personalización del mensaje para que el potencial cliente sienta que el anuncio fue creado especialmente para él.
¿Ya sabes quién es tu target?
Si todavía no tienes la respuesta a esta interrogante, es preciso que revises cuáles son tus objetivos empresariales (que sean medibles) e inicies un proceso investigativo basado en variables como la edad, sexo, nivel socioeconómico, ubicación geográfica, nivel educativo y hábitos de consumo.
Al respecto, Sánchez puntualizó que, incluso si se trata del mismo producto, existen segmentos poblacionales con expectativas muy diferentes entre sí; cada uno anhela una experiencia única.
Recuerda que el target o “público objetivo” es un término utilizado en varios ámbitos para definir al conjunto de personas con características en común a las que deseas alcanzar y que podrían elegirte si les aportas la mejor solución posible.
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