El expresidente de Estados Unidos, Bill Clinton, ha respondido satisfactoriamente al tratamiento que se le aplicó contra la infección urinaria por la que tuvo que ser hospitalizado el pasado martes en el sur de California.
“Todos los indicadores de salud van en la dirección correcta y su recuento de glóbulos blancos ha disminuido significativamente”, comunicó el pasado viernes el portavoz de Clinton, Angel Ureña.
Ureña agregó que el exmandatario permanecerá en el hospital al menos durante una noche más para continuar tomando antibióticos.
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De acuerdo con el personal del Centro Médico de la Universidad de California en Irvine, Clinton está en la unidad de cuidados intensivos por motivos de “seguridad y privacidad”.
A pesar de que al exgobernante lo ingresaron el martes, su portavoz no confirmó la noticia hasta el jueves por la noche, por lo que alarmó al mundo sobre su estado de salud, ya que, Clinton ha sufrido varios problemas cardíacos en el pasado.
