Uno de los principales sectores productivos del país, como lo es el agrícola, enfrenta riesgos para encontrar fertilizantes y pesticidas que eviten la presencia de bacterias en los cultivos en diferentes estados de Venezuela.
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Según detalló la agencia Reuters, productores nacionales han visto como desde 2018 sus granjas han sido víctimas de bacterias como el “dragón amarillo”, que han dañado unos 40.000 naranjos y limoneros en el caso de Carlos Romero, en Carabobo.
Las plantas, al no recibir el tratamiento correcto debido a la falta de insumos básicos o el análisis de expertos agrónomos, están en notable deterioro en distintas regiones de la nación.
Cacao, arroz y papas son varios de los productos que permanecen en riesgo creciente.
La defoliación, deformación y muerte de los árboles han sido provocados por insectos que transmiten la bacteria Huanglongbing, conocida coloquialmente como dragón amarillo.
De acuerdo a Naciones Unidas, un mayor deterioro de la producción nacional agrícola podría agravar la crisis humanitaria que ha empujado a cerca de cinco millones de personas fuera del país.
