El pasado 16 de noviembre se cumplió un año desde que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), se pronunció con una sentencia condenatoria al Estado venezolano quienes se encuentran en desacato con todas las medidas de restitución, rehabilitación, satisfacción, pecuniarias y garantías de no repetición en el caso de Linda Loaiza.
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A través de un comunicado emitido por Loaiza, manifestó que el Estado no ha demostrado ningún tipo de intención para prevenir hechos violentos o de sancionar a los responsables. Circunstancia que expuso la impunidad que existe en los casos de violencia contra las mujeres que asisten al sistema judicial en busca de ayuda legal.
Asimismo, aseguró que la condenada emitida por la CIDH debe ser cumplida, por lo que la misma no debe convertirse en “letra muerta”, en vista que, es responsabilidad convencional de protección que el Estado venezolano debe cumplir.